Abcesos de partes blandas y tratamiento de las heridas
I.INTRODUCCION
La piel está constituida por un
epitelio plano poli estratificado (epidermis) y una lámina propia o corion
llamada dermis, que se sitúa bajo a anterior y sobre el tejido subcutáneo, también
llamado panículo, hipodermis o fascia superficial. En el tejido subcutáneo se encuentra
tejido adiposo que apoya en una estructura fibrosa que envuelve a los grupos musculares
denominada fascia profunda. Esta fascia se comporta como una barrera ante una infección,
y cuando ésta llega a la misma, tiende a extenderse tangencialmente siguiendo
el plano de clivaje virtual existente entre la propia fascia y el tejido
subcutáneo. Rara vez el proceso infeccioso progresa en profundidad y alcanza el
músculo.
La vascularización de la piel
proviene de ramas de arterias musculo cutáneas que atraviesan la fascia
profunda y el tejido subcutáneo para llegar a la dermis. La necrosis o gangrena
cutánea, si es extensa, nunca se produce por una infección localizada en la
propia piel, sino que más bien es debida a un proceso infeccioso subcutáneo,
habitualmente necrosante, que produce vasculitis y trombosis de los vasos
nutricios de la piel a su paso por las fascias.
Los folículos pilosos y las
glándulas asociadas a ellos (glándulas sebáceas y sudoríparas apocrinas, que
están sobre todo en la axila y en región perineal) son con frecuencia el
asiento de infecciones que a menudo implican al tejido subcutáneo, ya que estas
estructuras se extienden más allá de la dermis en casi todas las regiones
cutáneas.
Fig. 2. Estructura microscópica de la piel, tejido subcutáneo y anejos glandulares.
II.CONCEPTO
II.1. Partes blandas: comprenden
el conjunto de tejidos no esqueléticos que cubren los huesos de la cabeza,
tronco y extremidades, y los tejidos blandos internos. En consecuencia, las
partes blandas están formadas por los músculos voluntarios e involuntarios con
en el pene, por el tejido adiposo, tejido conectivo y vasos que rellenan los
espacios entre músculos y aparatos. Se incluyen también regiones como la dermis
profunda e hipodermis, retro peritoneo, órbita ocular, etc.
II.2. Heridas: son traumatismos
abiertos que se caracterizan por una solución de continuidad de la piel o de
las mucosas, encontrándose por lo tanto sometida al riesgo de padecer una
infección.
III.CLASIFICACION
III.1.Según la dirección respecto
al eje mayor de la zona se divide en longitudinales, transversales, oblicuas y espiroideas.
III.2. Según a la profundidad se
dividen en:
A/ Arañazo en caso de presentar
solución de continuidad sólo de la epidermis; si además hay perdida de
sustancia se denominará desolladura.
B/ Herida superficial si solo
profundiza hasta tejido celular subcutáneo.
C/ Herida profunda, complicada o
compleja en caso de interesar a partes blanda más profundas (aponeurosis,
músculos, nervios y vasos).
Si afecta a las partes óseas se
denominará fractura abierta.
Si afecta a cavidades naturales
no comunicadas normalmente con el exterior se denomina herida penetrante, mientras
que si afecta a las vísceras de dicha cavidad se llaman heridas perforantes. Si
el agente traumático se introduce por los orificios anal o vaginal produciendo desgarros
de sus paredes se denominarán heridas por empalamiento.
III.3. Según la forma de las
heridas se dividen en lineales, arqueadas, angulosas, estrelladas, puntiformes,
crateriformes e irregulares. Cuando la herida se caracteriza por el
levantamiento de un gran territorio cutáneo perdiendo sus conexiones con los
planos profundos y manteniendo la unión con un pedículo se denominan heridas
con colgajo o pediculadas, que cuando afectan al cuero cabelludo se llaman scalp.
Su complicación más específica es la necrosis del colgajo cutáneo por isquemia.
Cuando no hay pedículo y hay una amplia zona cruenta se producen las heridas
por perdida de sustancia.
III.4. Según el agente productor
o mecanismo de producción se dividen en:
A/ Heridas punzantes producidas
por instrumentos afiladas. En ellas predomina la profundidad respecto a la
extensión en superficie.
B/ Heridas incisas producidas por
objetos cortantes con bordes nítidos, regulares y sin desgarros.
C/ Heridas contusas por el
impacto de objetos romos con gran energía cinética, y por eso sus bordes son
irregulares, contusos (zonas necróticas, hemorragias intersticiales,...).
D/ Heridas incisocontusas que
tiene componente de las heridas incisas y de las heridas contusas.
E/ Heridas por arrancamiento o
desgarro producidas por una situación con gran energía que arrastra de una
parte del cuerpo.
F/ Heridas por mordeduras
G/ Heridas por armas de fuego
H/ Heridas emponzoñadas por
mordeduras o picaduras por animales que al mismo tiempo inoculan venenos
responsables tanto de las características específicas de la herida como de las
manifestaciones sistémicas.
En la tabla de a continuación se
recoge de forma breve la clasificación de las heridas según distintos
parámetros.
DIRECCIÓN
|
PROFUNDIDAD
|
FORMA
|
MEC.
|
• Longitudinales
• Transversales
• Oblicuas
• Espiroideas
|
• Arañazo
• Herida superficial
• Herida profunda
Fractura abierta.
Herida penetrante (en
cavidad).
Herida perforante (en
víscera).
Herida por empalamiento
(vagina o ano).
|
• Lineales
• Arqueadas
• Angulosas
• Estrelladas
• Puntiformes
• Crateriformes
• Irregulares
Heridas con colgajo, pediculadas.
Scalp (cuero cabelludo).
|
• Punzantes
• Incisas
• Contusas
• Incisocontusas
• Arrancamiento desgarro
• Mordeduras
• Armas de fuego
• Emponzoñadas
|
Tabla 1. Clasificación de las
heridas según distintos parámetros.
IV. PATOGENIA
Las infecciones bacterianas cutáneas
pueden manifestarse en la piel como resultado de dos situaciones:
1. Proceso infeccioso primario
cutáneo.
2. Manifestación cutánea mediada
por toxinas producidas por un germen de la propia piel o de otro órgano.
IV.1.Resistencia natural de la
piel: la piel intacta es muy resistente a la invasión de una gran variedad de
bacterias, a las cuales está constantemente expuesta. Es difícil producir infecciones
localizadas tales como el impétigo, forunculosis y/o celulitis en los animales
de laboratorio o en voluntarios sanos. Los diferentes factores que influyen en
la resistencia cutánea a las infecciones están resumidos en la tabla 2.
IV.2 Patogénesis de las
infecciones bacterianas cutáneas: El establecimiento de una infección cutánea
depende de la relación entre el organismo y el huésped (piel), esta relación
bacteria-huésped, depende en gran
medida de tres factores:
A/ Propiedades patogénicas del
organismo: La capacidad de producir infección depende de la capacidad invasiva
del organismo, que depende en gran medida de los componentes antifagocíticos de
su superficie y de las propiedades toxigénicas del mismo.
B/ La integridad cutánea como
resistencia natural de la piel a las infecciones, determinada por los factores
resumidos en la tabla 2.
1. pH bajo
2. Presencia de sustancias antibacterianas
naturales (secreción sebácea)
3. Factores de inmunidad celular y humoral
4. Sequedad relativa de la piel
5. Interferencia bacteriana
|
C/ Respuesta inflamatoria: A
pesar de las escasas variaciones con relación a las células inflamatorias
presentes en la piel, existen diferentes patrones clínicos y morfológicos en las
infecciones cutáneas, generalmente dependientes de la localización de la
infección.
Con relación a la presentación
clínica y estructura cutánea afecta se clasifican las infecciones cutáneas en
impétigo, ectima, celulitis, fascitis necrotizante, funiculitis, forunculosis,
antrax, etc.
Los gérmenes llegan a la piel y
las partes blandas por inoculación directa a través de una Solución de
continuidad mucocutánea o mucho menos frecuente transportados por la sangre desde
otro lugar (metástasis séptica). La solución de continuidad puede ser el propio
folículo piloso, una herida accidental o quirúrgica, perforación de una víscera
hueca abdominal o una lesión preexistente como un seno pilonidal, una úlcera
por decúbito o varicosa, mal perforante plantar o pie de atleta. En la mayoría
de los casos el agente causal proviene de la superficie cutánea o mucosa del
enfermo, y en otras depende de otro individuo, animal o medio habiente.
V. ETIOLOGIA
V.1. Las lesiones más
superficiales son el impétigo, el eritrasma y las dermatofitosis, en las cuales
la infección se limita a la epidermis.
A/ Impétigo contagioso: Infección
cutánea inicialmente vesicular, que evoluciona hacia costra, causada
generalmente por estreptococos del grupo A, con frecuencia en el impétigo
contagioso también pueden aislarse estafilococos en combinación con el estreptococo
o de forma aislada. El impétigo es una infección contagiosa que afecta especialmente
a niños en edad preescolar. Es más frecuente en verano y otoño. Tras la adquisición
del estreptococo en la piel normal, a partir de un contacto cercano, el desarrollo
de traumatismos menores predispone al desarrollo de la infección cutánea. El proceso
inflamatorio del impétigo es superficial, con una vesículo-pústula unilocular, localizada
por encima del estrato granuloso, que en el curso de los días evoluciona hacia la
formación de una costra melicélica.
B/ El ectima es una lesión
semejante al impétigo que se inicia de la misma manera pero que se extiende de
forma más profunda para producir una úlcera superficial. Las lesiones suelen
localizarse en las extremidades inferiores de los niños o ancianos tras traumatismos
superficiales.
C/ La ectima gangrenosa es una
lesión de aspecto similar, localizada habitualmente en la región perineal, que
ocurre en el curso de la sepsis por Aeromonas hydrophila u otros bacilos
gramnegativos.
V.2. Si se forma una pústula en
el interior de un folículo piloso se denomina foliculitis. Si la infección
rebasa los límites del folículo y produce un pequeño absceso subcutáneo que drena
en la superficie de la piel se denomina furúnculo. En zona de piel poco
elástica, como en el cuello o la región pubiana, el furúnculo puede extenderse
lateralmente originando múltiples abscesos subcutáneos conectados entre sí que
drenan a través de varios trayectos fistulosos. Estas tres entidades
representan una continuidad en lesiones que afectan al folículo piloso causadas
por el S. aureus. La foliculitis se inicia con la afectación de un solo
folículo, con formación de una vesículo-pústula folicular, rodeada de un halo
eritematoso. Se desarrolla un furúnculo cuando la porción folicular afecta a la
dermis profunda y al tejido subcutáneo. Si se afectan varios folículos
desarrollándose una lesión más grande con múltiples puntos de drenaje se habla
de carbunclo o antrax, desarrollándose estas lesiones especialmente en
pacientes inmunodeprimidos o diabéticos. El término ántrax sirve para escribir
distintas lesiones, y es el mismo para denominar también la infección causada
por el Bacillus anthracis tras su inoculación cutánea. Debe diferenciarse el
antrax estafilocócico del antrax producido por el Bacillus anthracis.
V.3. La infección de las
glándulas apocrinas se denomina hidrosadenitis y es una enfermedad crónica,
recurrente, muy molesta generalmente causada por el estafilococo aureus, si
bien también es frecuente aislar bacilos gram negativos como el proteus. Es probablemente
la base de la mayoría de los abcesos axilares, inguinales, escrotales e incluso
perianales. Clínicamente las lesiones se manifiestan como nódulos violáceos
purpúricos, que semejan furúnculos y que drenan a la piel a través de conductos
sinuosos.
Hidrosadenitis
V.4. Los términos erisipela,
linfangitis y celulitis describen, respectivamente, infecciones de la dermis,
los vasos linfáticos y el tejido subcutáneo.
A/ Erisipela: infección
superficial con afectación de los tejidos profundos. La inflamación aguda
radica sobre todo en la dermis, la cual aparece muy edematosa por la intensa
afectación de los vasos linfáticos. Es una celulitis superficial con marcada afectación
linfática, generalmente producida por el estreptococo grupo A (Estreptococo pyogenes).
La erisipela se observa con frecuencia en los niños y adultos. Los factores predisponentes
en los adultos son el enolismo, diabetes, inmunosupresión, cicatrices quirúrgicas
recientes o antiguas con obstrucción linfática o venosa. Las lesiones se
inician con una pequeña herida en la piel que posteriormente no es detectable.
Las lesiones cutáneas tiene un aspecto eritematoso indurado, que adopta la
morfología de la piel de naranja, extendiéndose por la periferia con un margen
ligeramente sobreelevado en el cual pueden observarse ocasionalmente vesículas.
La localización característica es la afectación del dorso de nariz y mejillas
donde adopta el aspecto en alas de mariposa sin embargo, en la actualidad el
porcentaje más alto de casos se localiza en las extremidades inferiores
produciéndose a partir de lesiones banales como una tiña pedis interdigital.
Hay una lesión de una patología similar a la erisipela que se denomina
erisipeloide, que está causada por un bacilo grampositivo denominado Erysipelothrix
rhusiopathiae que contamina la carne y el pescado, y puede inocularse a través
de pequeños traumatismos producidos al manipular estos alimentos. Se localiza
en los dedos de las manos, tiene un aspecto más violáceo y progresa lentamente,
con escasa repercusión sistémica.
• Linfangitis: inflamación de los
vasos linfáticos, generalmente subcutáneos, se manifiesta en forma de estrías
rojas que a partir de una celulitis, se extiende en dirección del drenaje
linfático.
• Celulitis: cuadro de infección
superficial de tejidos blandos caracterizada por no estar muy bien demarcada
del resto de tejido blando adyacente sano, lo cual traduce la localización del
proceso infeccioso en la dermis profunda y tejido subcutáneo. Cuando la
celulitis afecta a la zona periungueal se denomina paroniquia.
V.6. Hay veces que la infección
afecta a tejidos profundos a la dermis y determina necrosis, produciéndose
colecciones de pus o abcesos.
Absceso en cara anterior del codo.
Esto hecho e importante, pues
determina el grado de gravedad y la actuación terapéutica a seguir. La necrosis
puede afectar a la porción superior del tejido subcutáneo, la totalidad de éste,
la fascia profunda o al músculo.
• Gangrena sinergística
bacteriana progresiva: Infección de curso subagudo que suele aparecer tras una
intervención quirúrgica, colostomías, ileostomías o úlceras tórpidas.
Suele acompañarse de escasa
afectación sistémica.
• Fascitis necrosante o
necrotizante: Es una infección aguda y grave de los tejidos subcutáneos
profundos y de la fascia, sin supuración evidente, pero con gran destrucción
tisular y necrosis. Se caracteriza por una rápida y extensa necrosis, que se extiende
por los planos de las fascias, para afectar posteriormente a la piel y los
tejidos subyacentes, y se acompaña de signos de toxicidad sistémica. Es
responsable de una elevada mortalidad (30%). La necrosis se localiza en un
principio en la grasa subcutánea, las fascias y la piel, respetando el músculo.
En etapas avanzadas se puede afectar el plano profundo muscular, dando lugar a
necrosis muscular con rabdomiolísis.
La fascitis necrotizante se
divide fundamentalmente en dos tipos, el tipo I causado por flora anaerobia
mixta, con bacilos aerobios gramnegativos y cocos grampositivos y el tipo II
causado por el estreptococo del grupo A.
Tipo
|
Agentes etiológicos
|
Factores
predisponentes
|
Manifestaciones clínicas
|
Fascitis necrotizante
tipo I
|
Flora anaerobia mixta,
bacilos gram negativos,
estreptococos.
|
Cirugía, diabetes
mellitus, enfermedad
vascular.
|
Afectación de grasa y
fascia.
|
Fascitis necrotizante
tipo II
|
Estreptococo pyogenes
(grupo A) solo o en
ocasiones acompañado de
estafilococo aureus o
epidermidis.
|
Traumatismo previo,
cirugía, diabetes,
venopunción,
enfermedad vascular
periférica.
|
Inicio brusco con dolor
intenso, fiebre y mal
estado general y
afectación
multiorgánico.
|
Tabla 3. Clasificación de la
fascitis necrotizante
El tipo I tiene varias formas
especiales dependiendo de la localización, y así existe por ejemplo la gangrena
de Fournier que es una celulitis que afecta a la fascia del escroto, periné y
órganos sexuales; o la gangrena sinérgica de Meleney que aparece tras cirugía
abdominal como una ulceración superficial limitada a la fascia superficial, con
necrosis y dehiscencia de la herida.
1. Cuando se produce una
colección de pus o absceso en el interior de un músculo se denomina piomiosítis
o miosítis supurada, mientras que el término mionecrosis, con diversos adjetivos
referentes al agente causal, se reserva para denominar cuadros infecciosos
necrosantes de los músculos rápidamente progresivos, en las cuales pueden constituirse
o no colecciones purulentas.
VI. CLINICA
En general, las infecciones de la
epidermis y los folículos pilosos, con excepción del antrax, cursan
exclusivamente con clínica local.
Las formas más graves son la
fascitis necrosante y la gangrena gaseosa. El diagnóstico de la primera debe
ser establecido de forma rápida, pues clínicamente es una infección infrecuente
de los tejidos subcutáneos y de la fascia, que progresa rápidamente con
necrosis y produce síntomas sistémicos graves. Se desarrolla generalmente en
las extremidades tras un traumatismo o lesión previa, desde heridas profundas,
heridas quirúrgicas, y hematomas, hasta lesiones triviales o erupciones por
varicela o pequeñas lesiones cutáneas banales como un arañazo o un corte. En la
fascitis necrotizante existe una rápida destrucción de la grasa y fascia, con
necrosis y licuefacción, infiltrado de polimorfo nucleares y trombosis de los pequeños
vasos. El aspecto clínico de las lesiones cutáneas en las primeras 24-48 horas
es de eritema e hinchazón y sólo es patognomónico entre el segundo y el cuarto
día, con la aparición de áreas azuladas y vesículas violáceas en la superficie
cutánea, que evolucionan hacia la formación de ampollas de contenido hemorrágico.
En algunos casos se aprecia crepitación. La linfangitis es muy rara. La
destrucción de nervios cutáneos produce anestesia y la necrosis de la grasa y
de la fascia profunda determina un desprendimiento de la piel, que queda
separada de los tejidos subyacentes. La infección evoluciona velozmente con
signos tóxicos importantes, escalofríos, taquicardia y fiebre alta. Hay una
disociación entre el aspecto sano de la piel y un dolor muy intenso.
VII. DIAGNOSTICO
La diferenciación entre
celulitis, procesos necrosantes subcutáneos y aquellos con participación
muscular es crucial. Es importante un alto índice de sospecha y el conocimiento
de los síntomas y signos precoces que indican la presencia de infecciones más
profundas, debido a la rapidez con la que estas progresan y su mal pronóstico.
Existen circunstancias
predisponentes como: edad avanzada, obesidad, alcoholismo crónico, diabetes
mellitus, enfermedad vascular periférica, neoplasia subyacente, insuficiencia
renal crónica o inmunodepresión. Suele existir el antecedente de traumatismo
local (venopunción en adictos a drogas parenterales) o cirugía. El curso es
agudo. Se afecta una zona determinada (miembros inferiores, área perineal e
inguinal, pared abdominal, etc.), apareciendo inicialmente una lesión de
aspecto eritematoso y posteriormente dolor y tumefacción; ocasionalmente los
signos locales pueden ser anodinos. La exudación fétida implica participación
de gérmenes anaerobios.
El diagnóstico sindrómico de la
mayoría de los cuadros es clínico. Hay cuatro signos principales que deben
hacer sospechar una infección necrotizante:
1) Edema e induración más allá
del área de eritema.
2) Ampollas o flictenas.
3) Crepitación.
4) Ausencia de linfangitis y/o
linfadenitis.
El diagnóstico de la fascitis
necrotizante es fácil de establecer en los estadios finales, sin embargo en
muchas ocasiones es muy difícil la identificación precoz de los procesos necrosantes
subcutáneos, por lo que está justificada la exploración quirúrgica de la lesión
o el examen de una biopsia que incluya piel, tejido celular subcutáneo y fascia.
En la tabla 4. Se muestran las situaciones de alerta ante las cuales está
indicada la exploración quirúrgica de las lesiones.
Sistémicas
|
Locales
|
• Confusión
• Taquicardia
• Taquipnea
• Cetoacidósis
|
• Gangrena de piel
• Cianosis, ampollas o piel bronceada
• Dolor severo o zonas de anestesia
• Abscesos con múltiples fístulas
• Crepitación o signos radiológicos de gas
• Drenaje de líquido hemático por lesiones de
piel
• Celulitis:
1. Con gran edema periférico
2. Con progresión a pesar de los ATB
3. En herida quirúrgica o hematoma
|
En situaciones en las que no hay
evidencia cutánea de infección pero existe dolor intenso y tumefacción en una
extremidad, puede ser útil la valoración de los pulsos distales, así como la medición
de la presión del compartimento muscular. Si dicha presión está elevada (por encima
de 40 mmHg) está indicada la fasciotomía inmediata, ante la posibilidad de un síndrome
compartimental.
Suele existir leucocitosis con
desviación izquierda y elevación de la velocidad de sedimentación. Si existe
necrosis muscular, las enzimas musculares (CK, LDH, aldolasa) suelen estar
elevadas.
El diagnóstico etiológico precisa
que se aísle el agente causal de las muestras obtenidas de las lesiones, las
cuales deben someterse a tinción de Gram, tinciones especiales para micobacterias
u hongos y cultivo en medios aerobios y anaerobios. La muestra más apropiada para
cultivo es la biopsia de una pieza que incluya piel, tejido celular subcutáneo
y fascia o el material necrótico.
En la radiografía simple puede
objetivarse aumento de partes blandas, desplazamiento de órganos o acúmulo
atípico de gas (gas lineal con disección gaseosa de planos musculares y fascia).
La ecografía también es útil en la valoración del aumento de partes blandas y
de la existencia de colecciones. La gammagrafía con leucocitos marcados permite
identificar el proceso inflamatorio en su fase inicial. La TAC y la RMN
localizan y determinan con exactitud la profundidad de la infección.
En las heridas en las que se
sospecha y más aún en las que se ha confirmado la entrada en cavidades (es
decir, las penetrantes) está indicada de entrada la exploración de dicha
cavidad, realizando laparotomías o toracotomías exploradoras.
VIII. TRATAMIENTO DE LAS HERIDAS
Se consideran como heridas
infectas aquellas cuyo período evolutivo ha superado el plazo de la latencia
bacteriana. Este período varía desde las 6 a las12 horas dependiendo de la vascularización
de la zona, duplicándose si oportunamente se realizó quimioprofilaxis. Así las heridas
en el cuero cabelludo, cara, cuello y manos puede prolongarse éste período
puede alargarse incluso hasta las 24 horas pues la vascularización del rostro
es mucho mayor. No obstante, estos períodos de tiempo se utilizan a título orientativo,
pues también influyen factores como la edad del paciente, grado o modalidad de
lesión traumática, carga y patogenicidad de la flora bacteriana contaminante,
etc.
También se incluyen en este grupo
aquellas lesiones que tratadas inicialmente como heridas no infectadas en su
evolución posterior muestran signos de infección.
VIII.1.Tratamiento de urgencia y
provisional
Ante cualquier paciente herido es
prioritario tratar preferentemente las circunstancias que representan mayor
riesgo vital.
Respecto a la herida, un
tratamiento urgente correcto puede proporcionar unos buenos resultados en la
terapéutica definitiva. Así pues, es obligado:
A/ Administrar sistemáticamente
antibióticos para que intervalo libre de infección (fase de latencia) se amplíe
hasta doce horas. Si es posible se iniciará la profilaxis antitetánica.
B/ Inmovilizar la zona para
disminuir el dolor y no provocar lesiones secundarias.
Se pueden administrar analgésicos
si no existen circunstancias que lo contraindiquen.
Es norma general contraindicar la
exploración instrumental de la lesión mediante sondas o estiletes. Esta
búsqueda incorrecta puede producir lesiones secundarias y favorece la difusión bacteriana.
VIII.2. Profilaxis antitetánica
En el tratamiento de las heridas
tiene un lugar muy importante la administración de la profilaxis de
antitetánica. Así pues, es importante conocer las heridas que son más subsidiarias
de ser tratadas con profilaxis antitetánica entre otras medidas.
CLASIFICACION DE LA
HERIDA
|
||
DATOS CLINICOS
|
PROPENSA
INFECCION
|
SIN PROPENSIÓN
|
Antigüedad de la
herida
|
> 6 h.
|
≤ 6 h.
|
Configuración
|
estrellada, en
desgarro
|
lineal
|
Profundidad
|
> 1 cm
|
≤ 1 cm
|
Mecanismo de
producción
|
accidente, quemadura,
congelación,
proyectil
|
superficie afilada
(cristal,
cuchillo,...)
|
Tejido desvitalizado
|
presente
|
ausente
|
Contaminación
(suciedad,saliva)
|
+
|
-
|
Tabla 5. Factores predisponentes
para la infección de las heridas.
ESQUEMA
GENERAL DE
|
||||
Hª
DE INMUNIZACION
ANTITETANICA
|
HERIDA
PROPENSA
A
|
HERIDA
NO PROPENSA
A
|
||
Desconocida
ó < 3 dosis
|
Toxoide
|
T-Ig
|
Toxoide
|
T-Ig
|
Sí
|
Sí
|
Sí
|
No
|
|
3
ó más dosis
|
No
*
|
No
|
No
**
|
No
|
Tabla 6. Pauta de administración
de profilaxis antitetánica.
T-Ig: Inmunoglobulina
antitetánica:
• < 30 kg: 250 U. I.M.
• _ 30 kg: 500 U. I.M.
en sitio diferente a la vacuna
(toxoide) y con distinta jeringa.
*: Sí, si más de 5 años desde la
última dosis de recuerdo.
**: Sí, si más de 10 años desde
la última dosis de recuerdo.
VIII.3. Profilaxis antibiótica
De forma empírica, en las heridas
contaminadas se utiliza como antibioterapia profiláctica: amoxicilina 500 mg +
ácido clavulánico 125 mg, una dosis cada 8 horas o cefazolina y en casos de
alergias doxiciclina más clindamicina.
En las heridas recientes no se
deben utilizar antibióticos de entrada. En estos casos sólo se administrará en
heridas por mordedura humana o de animales, heridas muy contaminadas o sucias y
las complicadas con fracturas o asociadas a otras lesiones concomitantes o en pacientes
portadores de otra patología médica.
VIII.4. Tratamiento médico
Los antibióticos más usados en
las infecciones de piel y partes blandas son:
A/ Penicilina G y
aminopenicilinas: Son de elección para tratar infecciones por estreptococo
pyogenes.
B/ Aminopenicilinas /IBL
(inhibidores de betalactamasas): Son activas contra cepas productoras de
beta-lactamasas de estafilococo spp., E. coli, Klebsiella spp., Proteus spp.,
Bacteroides fragilis. Son útiles
para el tratamiento de impétigo, celulitis, infecciones relacionadas con
úlceras de decúbito, pie diabético, heridas operatorias, mordeduras, donde
están involucrados los gérmenes antedichos.
Cefalosporinas de 1ª generación
(cefalexina, cefradina, cefazolina): Pueden considerarse como antibióticos de
alternativa para tratar infecciones por S. pyogenes y son útiles en infecciones
comunitarias causadas por especie estafilocócica.
C/ Macrólidos: Son una
alternativa de la penicilina para usar en infecciones por S.
pyogenes, en caso que el paciente
sea alérgico a betalactámicos. Aunque se han encontrado cepas resistentes, ello
es variable con el área geográfica. En nuestro país el porcentaje es muy bajo.
D/ Clindamicina: Tiene alta
actividad contra S. aureus y también inhibe la mayor parte de cepas de
Streptococcus, Peptococcus, Peptostreptococcus, Fusobacterium, Actinomyces, Nocardia,
Bacillus anthracis, pero no Enterococcus. La mayoría de Clostridium perfringens
son sensibles a clindamicina, pero otras especies pueden ser resistentes. Su capacidad
de penetrar en los leucocitos parece ser importante para la destrucción intracelular
de S. aureus.
E/ Fluoroquinolonas: La
ciprofloxacina es activa contra bacilos gram-negativos, alcanza altas
concentraciones en tejidos blandos y hueso, tiene excelente biodisponibilidad
por v/o que permite su uso en forma secuencial. Constituyen una alternativa
para el tratamiento de las infecciones del pie diabético. Sin embargo su uso en
monoterapia está limitado porque no actúa frente a gérmenes anaerobios.
G/ Metronidazol: Tiene actividad
sólo contra anaerobios.
H/ Aminoglucósidos (gentamicina,
amikacina): Se emplean asociados con beta-lactámicos o glucopéptidos,
ejerciendo acción sinérgica.
I/ Glucopéptidos (vancomicina y
teicoplanina): Se reservan para el tratamiento de infecciones por
Staphylococcus spp. meticilinorresistente.
VIII.5. Tratamiento quirúrgico
La curación satisfactoria de una
herida se produce por la cicatrización de la misma. Su tratamiento básico
consiste en afrontar sus bordes para que el organismo produzca el cierre de la
herida mediante sus mecanismos de reparación.
A/ El tratamiento de heridas no
infectadas pasa siempre por ser quirúrgico.
A.1/ Escisión de la herida o
Friedrich. Es un acto esencial en profilaxis antiinfecciosa, pues con esto se
elimina gran parte de las bacterias contaminantes. Además, los gérmenes residuales
se encontrarán con un medio poco propicio para su desarrollo al no existir restos
tisulares necróticos. Asimismo, se facilita la llegada de antibióticos y de
elementos naturales defensa antibacteriana. La escisión más idónea es la
extirpación en bloque de la herida, pero esto es sólo es posible cuando la
separación de los bordes no supera los 2 cm.
Lo habitual es extirpar el borde
cutáneo con un grosor aproximado de 2 mm, aumentándose cuando hay signos
inflamatorios o de contusión grave. El tejido subcutáneo puede extirparse con
más amplitud (hasta 2 cm). En las fascias debe hacerse una amplia exéresis para
evitar un posterior síndrome compartimental. El músculo se extirpará generosamente
hasta encontrar tejido muscular sangrante y contráctil al corte. En las fracturas
abiertas sólo se extirparan los fragmentos óseos pequeños y libres.
A.2/ Cierre de la herida:
Cualquier herida es capaz de cicatrizar, pero dependiendo cuando se realice la
aproximación de los tejidos la cicatrización se clasifica en:
A.3/ Cicatrización por 1ª
intención: se realiza de forma inmediata. Es la más frecuentemente utilizada y
la que produce una cicatriz de mejor calidad y en menor tiempo. Se produce en
las primeras 24 horas desde que se produjo la herida y cuando ésta no está
contaminada y presenta o es posible obtener bordes regulares que permitan un aceptable
afrontamiento.
Hay ciertas circunstancias que
contraindican la sutura primaria:
a) Heridas intensamente
contaminadas
b) Cuando existe un considerable
componente contuso con extensa atracciones tisulares y trayectos irregulares,
como por ejemplo heridas por asta de todo, heridas por armas de fuego o heridas
emponzoñadas.
-Siempre que se sospeche
contaminación por gérmenes muy patógenos, como las heridas por mordedura o en
individuos con flora cutánea altamente patógena como labradores, poceros,
barrenderos, etc.
-Cuando se asocien circunstancias
de isquemia
- Cuando el tratamiento se ha
demorado más allá de 6-8 horas (12 horas para zonas muy vascular izadas).
Siempre que no se pueda vigilar
la evolución de la herida.
A.4/ Cicatrización por 2ª
intención o diferida: se produce cuando el cierre de la herida se ha demorado
más de 24 horas, requiere un Friedrich o un refresco de sus bordes previamente
a la sutura, o bien se deja que cierre por sí sola. Produce una cicatriz de
peor calidad y tarda mucho más en curar.
Siempre que se pueda se
infiltrará la región con anestesia local. Se recomienda un anestésico local
como la mepivacaina a 1% sin vasoconstrictor (sobre todo en las partes acras).
Una vez anestesiada la zona se limpiará meticulosamente la herida y se
explorará con la extracción de cuerpos extraños y una buena hemostasia. Debe
hacerse un lavado profuso de la zona con agua y jabón neutro seguido de
solución salina. Posteriormente debe rasurarse la zona si es necesaria, excepto
las cejas que no deben rasurarse. Comprobación de la hemostasia que puede
requerir desde la simple compresión hasta ligaduras de vasos o utilización del
bisturí eléctrico. Después se procederá a la aproximación de los bordes de la
herida, para lo cual pueden utilizarse desde con hilos de sutura, agrafes, puntos
de esparadrapo o pegamentos tisulares. Posteriormente, para prevenir la
contaminación, aislarlas del medio ambiente y protegerlas las heridas se
protegen con apósitos.
Las grandes heridas en el cuello
por regla general no deben suturarse herméticamente debido a la gran propensión
a producir compresión, y en todo caso dejar siempre drenajes con sistema
aspirativo.
**En las heridas infectas se
encuentra absolutamente contraindicada la escisión ya que favorece la difusión
de los gérmenes al eliminar la barrera fibrino-leucocitaria periférica y aporta
nuevos trayectos donde aquellos pueden anidar. No obstante, puede realizarse
una extirpación limitada de los esfácelos, sin incluir tejido sano, y el
vaciamiento de colecciones purulentas y la apertura de espacios residuales son
maniobras de gran efectividad terapéutica.
Todos los procesos infecciosos
que afectan al tejido subcutáneo precisan tratamiento quirúrgico precoz y
drenaje de las colecciones de pus.
En los cuadros graves de fascitis
necrotizante, todo el tejido desvitalizado y necrosado debe ser extirpado. La
fascia profunda debe abrirse para asegurar que no existe afectación muscular.
Se debe repetir la exéresis de los tejidos desvitalizados y la limpieza del
área en los días sucesivos tantas veces como se considere necesario. La herida
hay que dejarla abierta y considerar en el momento oportuno la conveniencia de
un injerto. En el caso de la gangrena gaseosa, la amputación puede hacerse
necesaria cuando la enfermedad afecta a una extremidad. En la gangrena de
Fournier casi nunca se requiere orquiectomía; no obstante, al igual que en
aquellos procesos que afectan la región perineal, debe ser considerada la realización
de colostomía precoz para evitar la contaminación fecal de dicho territorio.
Un tratamiento con muy bueno
resultados para la fascitis necrotizante y la gangrena de Fournier consiste en
la oxigenoterapia hiperbárica. Esta terapia también se puede emplear en enfermos
portadores de vasculopatías periféricas (arteriosclerosis, arteriopatía
diabética, síndrome postrombótico, tromboangeítis obliterante, vasculitis por
esclerodermia, isquemias postraumáticas) que presentan trastornos tróficos de
larga evolución, que persisten a pesar de haber agotado todos los recursos
terapéuticos conservadores e invasivos.
La cicatrización es un proceso
oxidependiente, pues con presiones tisulares de oxígeno inferiores a 40 mmHg,
la neovascularización, la producción de fibroblastos y la formación de colágeno
están disminuidas o abolidas. Por el mismo mecanismo se inhibe la formación de radicales
libres intralisosomiales, resultado de la actividad fagocítica de los
granulocitos polinucleares, y se mantiene el círculo vicioso
hipoxia-infección-retardo de cicatrizaciónhipoxia.
Otra situación también especial
la constituyen los injertos y colgajos, que se implantan en territorios
hipóxicos, irradiados e infectados, así como los reimplantes. En todas estas
situaciones la hipoxia tisular en las primeras horas es la responsable de gran
número de fracasos terapéuticos.
La oxigenoterapia hiperbárica
aumenta la presión tisular de oxígeno estimulando con ello la neo
vascularización, la proliferación de fibroblastos y una producción de colágeno
más estable al potenciar el paso de prolina a hidroxiprolina y restaurar la
función bactericida de los macrófagos. Es decir, la oxigenoterapia hiperbárica
restaura los procesos de angiogénesis, autor reparación y autodefensa abolidos
por la hipoxia mantenida, lográndose en muchos casos la cicatrización del
proceso.
La pauta suele consistir en un
número variable de sesiones de 60 minutos a 2 o 2,3ATA hasta que se aprecie un
aumento de la granulación, lo que suele ocurrir entre la segunda y la cuarta semana
de tratamiento. Muchas veces son necesarios períodos de tratamiento
prolongados. El uso de la oximetría transcutánea facilita la selección y valoración
de los pacientes. La oxigenoterapia hiperbárica puede aplicarse de forma
ambulatoria, y no desplaza los tratamientos clásicos que el paciente precise,
como técnicas de cirugía vascular, antibioterapia y curas locales.
En las heridas penetrantes en
cavidades hay que realizar una exploración de la cavidad como primera actuación
y resolver la patología en un dicho acto quirúrgico si es posible.
CUESTIONARIO
1) ¿Cuál es mecanismo principal
de la necrosis cutánea?
a) Infección localizada de la
piel.
b) Acción de la toxina producidas
por los gérmenes.
c) Vasculitis y trombosis de los
vasos nutricios de la piel.
d) Síndrome compartimental.
e) Embolia grasa
2) ¿Qué estructura no se puede
considerar parte de los tejidos blandos?
a) Músculos voluntarios.
b) Tejido conectivo.
c) Vasos nutricios.
d) Músculo liso de vísceras
intestinales
e) Orbita ocular.
3) ¿Cuál de los siguientes
términos no entra a formar parte de la clasificación de las heridas según su dirección respecto al
eje mayor?
a) Longitudinales.
b) Circulares.
c) Transversales.
d) Oblicuas.
e) Espiroideas.
4) Según la profundidad de las
heridas, ¿cuál de éstas no pertenece a dicha clasificación?
a) Arañazo.
b) Herida superficial.
c) Herida profunda.
d) Herida compleja.
e) Herida penetrante.
5) ¿Cómo se denomina la herida
que afecta a las partes óseas?
a) Herida ósea.
b) Fractura ósea.
c) Herida complicada.
d) Fractura abierta.
e) Herida abierta.
6) ¿Cómo se denominan las heridas
que afectan a las cavidades naturales que normalmente
no están comunicadas con el
exterior?
a) Herida penetrante.
b) Herida perforante.
c) Herida interna.
d) Herida comunicante.
e) Herida cavitaria.
7) ¿Cómo se llaman las heridas
que afectan a las vísceras de una cavidad no comunicada con
el exterior?
a) Herida penetrante.
b) Herida perforante.
c) Herida interna.
d) Herida comunicante.
e) Herida cavitaria
8) Según el mecanismo de
producción de las heridas, ¿cuál de ellas está causada por
mordeduras o picaduras de
animales que inoculan venenos?
a) Heridas punzantes.
b) Heridas emponzoñadas.
c) Heridas por mordeduras.
d) Heridas incisas.
e) Heridas contusas.
9) Según la patogenia de la
infección de las heridas, ¿cuál de los siguientes factores no
determina la integridad cutánea
como resistencia natural de la piel las infecciones?
a) pH bajo.
b) Presencia de sustancias
antibacterianas naturales.
c) Factores de inmunidad celular
y humoral.
d) Humedad de la piel.
e) Interferencia bacteriana.
10) ¿Cuál es el mecanismo
principal de llegada de gérmenes a la piel y partes blandas para
producir infección?
a) Transportados por la sangre
desde otro foco.
b) Inoculación directa a través
de una solución de continuidad.
c) Inhalación del medio ambiente.
d) Portador crónico.
e) Ingestión del germen.
11) ¿Cuál de las siguientes
entidades no pertenece a las infecciones más superficiales?
a) Impétigo.
b) Eritrasma.
c) Dermatofitosis.
d) Ectima gangrenoso.
e) Fascitis necrotizante.
12) El impétigo contagioso está
causado principalmente por:
a) Estreptococo del grupo A.
b) Estafilococo aureus.
c) Estafilococo epidermidis.
d) Pseudomona aeruginosa.
e) Clostridium perfingens.
13) El ectima gangrenoso es una
lesión que se presenta generalmente en:
a) Región retroauricular.
b) Cuero cabelludo.
c) Región perineal.
d) Región pretibial.
e) Espacios interdigitales.
14) De las siguientes entidades,
¿cual es la que más superficialmente afecta al folículo piloso?
a) Furúnculo.
b) Foliculitis.
c) Carbunco.
d) Ántrax.
e) Absceso.
15) ¿Cómo se denomina la
infección de las glándulas apocrinas?
a) Foliculitis.
b) Furúnculo.
c) Hidrosadenitis.
d) Quiste sebáceo.
e) Absceso glandular.
16) ¿A que estrato de la piel
afecta la erisipela?
a) Dermis.
b) Epidermis.
c) Tejido subcutáneo.
d) Fascia profunda.
e) Anejos glandulares.
17) ¿Qué afirmación es falsa con
respecto a la gangrena bacteriana progresiva?
a) Es una infección de curso
subagudo.
b) Puede aparecer tras
intervenciones quirúrgicas.
c) Suele acompañarse de una gran
afectación sistémica.
d) Puede aparecer en el contexto
de una úlcera de evolución tórpida.
e) Afecta al tejido subcutáneo.
18) Respecto a la fascitis
necrotizante tipo II, ¿qué afirmación es falsa?
a) Está causada principalmente
por estreptococo pyogenes.
b) Puede estar causado por
estafilococo aureus o epidermidis.
c) Puede aparecer tras traumatismo
previo.
d) La diabetes es un factor
predisponentes.
e) El comienzo es lento y con
poca afectación del estado general.
19) La gangrena de Fournier es
una forma especial de fascitis necrotizante que suele afectar a:
a) Cuero cabelludo.
b) Suelo de la boca.
c) Escroto, periné y órganos
sexuales.
d) Porción distal de las
extremidades.
e) Articulaciones
20) La forma más grave de
infecciones cutáneas y de partes blandas es:
a) Absceso perianal.
b) Fascitis necrotizante.
c) Gangrena sinergística
bacteriana progresiva.
d) Ántrax.
e) Furúnculo.
21) ¿Cuál de los siguientes
signos no es importante para sospechar una infección
necrotizante?
a) Edema.
b) Induración.
c) Crepitación.
d) Ampollas.
e) Linfangitis y/o linfadenitis.
22) ¿Cuál es tratamiento de
elección ante un síndrome compartimental?
a) Antiinflamatorios.
b) Reposo.
c) Compresión de la extremidad.
d) Fasciotomía.
e) Punciones evacuadoras.
23) ¿Cuál de los siguientes
factores no es predisponente para la infección de una herida?
a) Antigüedad de la herida mayor
de 6 horas.
b) Configuración estrellada o con
desagarro.
c) Mecanismo de producción de la
herida por un cuchillo.
d) Herida producida por una
quemadura.
e) Herida producida por
congelación.
24) ¿En cual de las siguientes
situaciones estaría indicada la profilaxis antitetánica con
toxoide y gammaglobulina
antitetánica?
a) Herida propensa al tétanos con
historia de inmunización antitetánica con 3 dosis hace
3 años.
b) Herida propensa al tétanos con
historia de inmunización antitetánica con 3 dosis hace
7 años.
c) Herida propensa al tétanos con
historia de inmunización antitetánica de 2 dosis.
d) Herida no propensa al tétanos
con historia de inmunización antitetánica con 3 dosis
hace 3 años.
e) Herida no propensa al tétanos
con historia de inmunización antitetánica con 3 dosis
hace 7 años.
25) ¿Qué antibiótico o
combinación de ellos usaría de manera empírica ante las heridas
contaminadas?
a) Doxiciclina.
b) Clindamicina.
c) Amoxicilina+Ac. clavulánico.
d) Gentamicina.
e) Metronidazol.
RESPUESTAS CORRECTAS
1. C 2.D 3.B 4.E 5.D 6.A 7.B 8.B
9.D 10.B
11.E 12.A 13.C 14.B 15.C 16.A
17.C 18.E 19.C 20.B
21.E 22.D 23.C. 24.C 25.C
Abcesos de partes blandas y tratamiento de las heridas
Reviewed by RabwinparaCristo
on
octubre 04, 2018
Rating:
No hay comentarios.: